¿Cómo es el desarrollo intelectual de un niño de 6 a 12 años?
El desarrollo intelectual de un niño de 6 a 12 años hace referencia a las destrezas de la mente humana para razonar, entender, la toma de decisiones, pensamientos, acciones, etc.
En los niños, el desarrollo intelectual varía de acuerdo con vivencias generadas al largo de su vida y el trabajo realizado en el desarrollo y fortalecimiento de habilidades cognitivas, blandas, sociales y motoras. Pues, si se tiene alguna falencia en estas, el desarrollo intelectual del niño se puede ver afectado.
¿Cómo son los primeros años de desarrollo intelectual?
Es claro destacar que los primeros años de vida de un niño de 6 a 12 años son sumamente importantes porque requieren del aprendizaje de todo lo que les rodea y en muchos casos, la influencia de los padres o tutores se refleja en las destrezas y habilidades de los pequeños.
El conocimiento adquirido en la escuela puede influir mucho en el razonamiento, pensamiento, actitudes y habilidades cognitivas que pueda generar el niño. A edades de 6 a 12 años, los niños ya deberían estar en una educación primaria.
Aquí los maestros no solo cumplen con el objetivo de enseñar habilidades comunicativas, sino que también imparten conocimientos sobre áreas básicas del conocimiento, como son las matemáticas, el lenguaje, la escritura, entre otras. Las cuales requieren de atención y constante disciplina por parte de los niños, para alcanzar dichos objetivos.
Física y biológicamente el cerebro de los niños comienza a crecer al igual que el resto de su cuerpo, esto conlleva a que el niño genere más neuronas y, por ende, su capacidad de aprendizaje también. Esto se puede evidenciar en su intelecto, ya que su capacidad de memoria y atención son más asertivas.
¿Cómo incentivar el desarrollo intelectual de un niño de 6 a 12 años?
El desarrollo intelectual de un niño de 6 a 12 años se da por medio del aprendizaje significativo y progresivo de acuerdo con su edad. En las edades que estamos estudiando los niños deben adquirir habilidades de lectura, escritura, pensamiento lógico e intelectuales, en las cuales factores como la atención y la memoria tienden a ser parte fundamental para un buen desarrollo.
Por lo tanto, un buen desarrollo intelectual se evidencia en la etapa adulta, de acuerdo con sus acciones, pensamientos, relaciones interpersonales, en la toma de decisiones, su capacidad de razonamiento y pensamiento lógico.
Habilidades de atención en el desarrollo intelectual
La atención influye en el desarrollo cognitivo en estas edades, debido a que los niños ya deben aprender a identificar y seleccionar información relevante y la menos relevante. Por otro lado, su capacidad de recordar.
Recuerda que la atención puede ser dada por acciones y/o actividades de interés del niño, lo que generan inicialmente un aumento en su concentración y posteriormente la propia atención.
Un buen trabajo en este aprendizaje permite que los niños tomen mejores decisiones, pues aquí los niños piensan las diferentes posibilidades, antes de actuar, permitiéndose recordar y relacionar conceptos.
Habilidades de memoria en el desarrollo intelectual
La memoria hace parte del almacenamiento de información que los pequeños han adquirido ya sea en ámbitos sociales, familiares o escolares. Pues la memoria afecta el desarrollo intelectual de los niños, porque le permite generar habilidades en la toma de decisiones, acciones y claramente en el ámbito educativo.
Las acciones repetitivas y la diciplina, generan que la memoria se fortalezca sobre los conceptos aprendidos sobre áreas básicas del conocimiento o habilidades propias de la biología humana, como es el comer, dormir, hacer necesidades, etc.
Recomendaciones para los padres
El desarrollo intelectual de los niños, permiten que autorregulen sus emociones y su conducta.
Por ende, se recomienda que nos niños dediquen tiempo en practicar juegos y actividades como rompecabezas, sopa de letras, pintar mándales, cantar, leer, contar cuentos, tocar instrumentos, aprender nuevas cosas, entre otros, para que fortalezcan su desarrollo intelectual.
Por otro lado, dormir bien y una buena alimentación, influye en la producción de neuronas y su crecimiento biológico adecuado.